Vídeos del V Salón del Cómic y Manga de Castilla y León
Os ofrecemos algunos vídeos del V Salón del Cómic y Manga de Castilla y León y noticias publicadas. En los próximos días también colgaremos una galería fotográfica.
El V Salón del Cómic y el Manga cerró ayer dos intensas jornadas en la Feria de Muestras de Valladolid con la sensación de que, a pesar de la inmensa juventud de gran parte de sus más de 3.500 visitantes, camina hacia la mayoría de edad. El balance estadístico corrobora las impresiones de sus organizadores: el doble de expositores que el pasado año (de 9 a 18), tres espacios diferentes a cada cual más participativo y un desfile de disfraces manga (‘cosplay’) con varios cientos de personajes inolvidables tomando la Plaza Mayor de Valladolid. «Queríamos que fuera el año del salto adelante y creemos que lo hemos logrado», resumía satisfecho ayer tarde el responsable de este salón, Carlos Ramírez. La ubicación en la Feria de Muestras de Valladolid le ha dado también visibilidad y respeto.
El mundo del cómic, habitualmente encerrado entre las páginas de los tebeos y las lecturas y ensoñaciones solitarias de su legión de fans, demostró ayer que, si algo tiene garantizado, es el futuro, independientemente de las incógnitas que los dibujantes apuntan sobre la viabilidad del tebeo y sus nuevos soportes. Esto no parece preocupar al gran tejido asociativo, la mayoría juvenil, que llegó ayer desde casi toda Castilla y León, además de Madrid. «Los chavales no se quedaban a dormir porque no está permitido, si no, las actividades hubieran continuado toda la noche», insistía ayer Ramírez.
Un enjambre de jóvenes ataviados con el barroquismo de sus héroes de papel se multiplicó durante todo el fin de semana para atender a todas las propuestas. Desde gastronomía japonesa, a karaokes, concurso de ‘cosplay’ y dibujos, salones de juegos de rol y Wii, talleres de caricaturas, hasta exhibiciones de kick boxing (boxeo japonés) y charlas y debates con autores consolidados.
Frikis nipones
«En Japón no tenemos carnavales por eso potenciamos a los ‘otaku’ (algo así como ‘friky’ en japonés)», trataba de explicar Akiko Sawada una nipona que lleva siete años enseñando caligrafía de su archipiélago en Valladolid. Más allá de la tragedia del terremoto, el imperio del sol naciente fue noticia con gran número de actividades que recrean su milenaria cultura, convertida en objeto de culto por su plasmación en los cómic manga. No faltaron los concursos del Para Para, un baile con música electrónica de fondo que se hace embutido en los trajes de estos héroes.
En el apartado de grandes firmas, el incombustible Jesús Redondo (‘El Capitán Trueno’) volvía a mostrar su generoso esfuerzo por responder a las peticiones de dedicatorias de sus fans. Las nuevas generaciones como Janina Görrissen, Lidia Fernández, Marc Rueda o Jeremi Pirot, trataba de seguir sus trazos a destajo.
La cada vez mayor presencia de la ilustración en los programas educativos ha encontrado el apoyo de universidades como la Miguel de Cervantes, la UVA y escuelas de diseño. «Lo lúdico y lo académico serán las señas de identidad para el futuro», aseguró el director de un salón cuyo presupuesto ha llegado ya este año a los 20.000 euros.